El Diccionario de la Real Academia de la Lengua no recoge sorprendentemente en su última edición el término “truño”, de gran aceptación y uso habitual. ¿Qué es un truño? “Una mierda como un puño”, dice el acervo popular. Es un término que se usa más en sentido metafórico (“¡vaya truño de partido!”) que real (“he soltado un truño que… que menudo peso me he quitado de encima”). Si hablamos de cine, por ejemplo, un truño, una mierda como un puño, es toda la saga Transformers,
El fin de semana pasado estuve viendo la película de Christopher Nolan Interstellar, una película que tenía muchas ganas de ver y de la que estaba dispuesto a disfrutar durante sus casi tres horas de metraje. Su director, Christopher Nolan, es uno de los que más me interesan en este momento, como David Fincher (El Club de la Lucha, Benjamin Button, Se7en, Perdida), porque suelen ofrecer siempre algo diferente. Su Memento (2000) es una película intrigante, original y asombrosa que te mantiene en vilo hasta la resolución del complejo entramado, y los tres Batman son para mí los mejores, con mucha diferencia sobre el resto. Y mucho mejores que la mayoría de películas de superhéroes. Nolan ejerce no sólo de director, sino también de guionista, lo cual hace que aumente mi admiración e interés por el personaje. En Interstellar comparte la escritura del guion con su hermano Jonathan.
Como la película se acaba de estrenar, voy a tratar de evitar hacer spoiler, y como ya se ha escrito mucho sobre los aciertos científicos y las incongruencias de la misma, y además no soy ni mucho menos un experto, voy a tratar de evitar este tema y hablar de cine, sólo de cine. Dejaré algunos enlaces para el que le interese el tema.
La película arranca con el supuesto de una Tierra amenazada por la destrucción de las cosechas y por tormentas de polvo que hacen inhabitable el planeta. La calidad de vida ha retrocedido de modo considerable en la sociedad: enfermedades pulmonares, falta de higiene, peor alimentación, recortes en investigación y sanidad (parece que Montoro y de Guindos gobiernen en ese Estados Unidos del futuro),… La NASA se plantea entonces buscar otros planetas que reúnan unas condiciones de vida adecuadas para el ser humano, para lo cual manda una docena de misiones tripuladas a otras galaxias a través de un agujero de gusano que se ha encontrado cerca de Saturno. Colonizar otros mundos para consumir desaforadamente sus recursos, algo tan viejo como el ser humano.
Un paréntesis. No puedo evitar oír hablar de los agujeros negros, de cómo absorben la materia y todo a su alrededor, incluso la luz, y recordar aquella genial frase de la película de Woody Allen Desmontando a Harry.
El protagonista, Harry (Woody Allen), está preocupado, como los científicos de Interstellar, porque el universo se desintegra, y le dice a la prostituta de color con la que acaba de echar un polvo. “¿Sabes lo que es un agujero negro?”. Y esta responde:
Es con lo que me gano la vida.
Chiste fácil aparte, es una bajada a la tierra, al fango. Qué coño me importa lo que ocurra a millones de kilómetros de la Tierra si no sé qué voy a comer esta noche.
Volviendo a Interstellar, la película se centra en la misión encabezada por dos actores que no soporto, Matthew McConaughey y Anne Hathaway. Los dos están muy bien en la película, me he reconciliado en parte con ellos. La película tiene escenas maravillosas, muy bien rodadas, con gran cantidad de medios, y los paisajes de los planetas son espectaculares. Hay que verlos en pantalla grande. Por momentos me recuerda a otras películas, como los momentos más técnicos, tipo ensamblajes de naves, por ejemplo, con música clásica de fondo, que remiten directamente a 2001: Odisea en el espacio.
La primera mitad de la película me estaba encantando, por el planteamiento, los medios, una historia nada sencilla, la jodida ruptura del espacio-tiempo y la relación padre-hija. McConaughey se ve obligado a abandonar a sus hijos, a los que no sabe si volverá a ver, y especialmente dolorosa es la separación de su hija de 10 años, Murphy (Jessica Chastain), que se convertirá después en un personaje fundamental para la historia. Toca muchos otros temas, como la Inteligencia Artificial, que también daría para escribir un post completo. La novedad de estos robots es que tienen un sentido del humor graduable, lo cual me resulta más difícil de comprender que el hecho de fabricar un robot tan completo de movimientos y prestaciones. ¿Cómo programas algo tan humano como el sentido del humor? ¿Convirtiendo el lenguaje de Chiquito de la Calzada a códigos binarios? ¿“Jaaaarl” igual a 10001101011?
Para mí la película empieza a decaer en el momento en que llegan al planeta del astronauta Mann, interpretado por Matt Damon. ¡Matt Damon saliendo apenas diez minutos! Y es que el reparto es otro aspecto a destacar de la película, los secundarios son de lujo: Damon, Michael Caine, Jessica Chastain, Ellen Burstyn, Wes Bentley,…
A partir de ese momento, y una vez que los protagonistas comprenden el verdadero sentido de su misión, la película entra en los tenebrosos mundos de la explicación científica de las dimensiones, el horizonte de sucesos, la singularidad del agujero negro, el espacio-tiempo, la relatividad y el ser extra-dimensional que rompe esas barreras. Todo muy complicado de entender, casi imposible de explicar. Aunque visualmente las escenas estén muy logradas, reconozco que a un tipo simple como yo, o como la prostituta de Woody Allen, se me hizo pesada.
¿Es Interstellar un truño? ¿Un truño pretencioso? No, por favor, no. Pero me quedo con Gravity, con la sencillez de su historia.
Cuando acabó Interstellar había un silencio bestial en el cine, yo creo que nadie se atrevía a compartir su opinión con el compañero. ¿Cómo vas a decir que no te ha gustado? ¿O que no la has entendido? Lo tiene todo para ser una obra maestra y sin embargo se queda como esos planetas que buscan, a años luz. Me quedo con Gravity y con la visión del espacio como si estuvieras allí mismo. Con su 3-D que te permite experimentar la profundidad del espacio y sentir casi la falta de gravedad. Con ver la Tierra limpia, como si no tuviera la capa de mierda que estamos dejando.
Hablando de mierda, hay una película de ciencia ficción con un planteamiento que me parece mucho más cercano y desolador. No veo que el problema de la humanidad el día de mañana provenga de la pérdida de cosechas, como plantea Interstellar. Los avances tecnológicos en este campo permiten creer precisamente en todo lo contrario: más cosechas al año, hortalizas y frutas de mayor tamaño, más resistentes, mayor productividad,… y la proliferación de transgénicos. El problema de la Tierra vendrá porque la habremos convertido en un inmenso vertedero, como en Wall-E.
La película de Pixar muestra una Tierra abandonada por los seres humanos al estar convertida en un gigantesco chatarrero y basurero sin vida, un logro realizado a base de esquilmar los recursos naturales y despreocuparse por el medio ambiente. Pese a que parezca una película infantil, como casi todas las de Pixar tiene mucho más trasfondo. Hay otra parte inquietante de Wall-E, y es ver ese comportamiento de los seres humanos en esas colonias espaciales. Los humanos, cada vez más gordos, han perdido la capacidad de andar y, algo mucho peor, la de comunicarse cara a cara. Sólo lo hacen a través de pantallas electrónicas, tablets o iPads. Y este futuro no es tan lejano, está ya aquí, si me pongo en plan catastrofista.
La parte más farragosa de Interstellar la pone a la altura de 2001: Una Odisea en el espacio. Kubrick discutió mucho con Arthur C. Clarke sobre la plasmación en imágenes del complejo final. Durante años pasé de esa película, tenía momentos infumables. «Truños» dentro de una buena película. Al cabo de un tiempo me interesé de nuevo por la historia y su significado, y me leí el libro con interés. Pero el libro tropieza en la misma piedra que la película y que Interstellar: en la explicación de esa ruptura del espacio tiempo, de las tres dimensiones. Os dejo algunos fragmentos del final del libro, que he releído estos días porque me recordaban el final del film de Nolan:
Y así permanecería hasta que decidiera una nueva forma, o sobrepasara las necesidades de la materia… ¡Y cuán ingenuo haber imaginado que las series acababan en ese punto, en sólo tres dimensiones!… Ante Bowman apareció el luminoso remolino de la Galaxia… Aquí estaba él, al garete en aquel gran río de soles… aquí, el Tiempo no había comenzado…Inconscientemente lo había atravesado él una vez; ahora debía atravesarlo de nuevo… Pues él había dejado atrás las escalas del tiempo de su origen humano… lanzóse a través de los años-luz… Volvía a estar, precisamente donde lo deseaba, en el espacio que los hombres llaman real.
Lo habéis pillado, ¿no? Claro, meridiano, como la escena de la biblioteca. O como cuando nos dice la NASA que han conseguido fotografíar el Big-Bang, la explosión que dio origen a todo, al universo. Y nos lo tenemos que creer de unos tíos que lo más lejos que han llegado es a la Luna, a 384.000 kilómetros. Yo tenía un Citroen BX con casi tantos kilómetros, y no era nada pretencioso. El principio del universo, pfff….
Hay otra película, Contacto, basada en el libro de Carl Sagan, que también intenta entrar en esos agujeros de gusano que permiten desplazarse por el universo, pero la resolución es más pobre aún que las anteriores.
Será que mi cerebro no da para más, y eso que lo he intentado. Me leí el libro de Sagan en busca de ayuda para que mentes privilegiadas me explicaran esas paradojas o singularidades que me cuentan los científicos, pero al final se limitaba a una búsqueda en el pasado de uno mismo. Yo tengo bastante con intentar llegar a fin de mes.
Termino ya. El post se titulaba Truños interestelares. Puro marketing para atraer la atención. Interstellar no es un truño, como ya he dicho, pero si un domingo por la tarde ponen en una cadena la de Nolan y en otra Armageddon, seguramente terminaré viendo la segunda. Pese a su estupidez, pese a que sea un insulto a la inteligencia. Busco entretenimiento, diversión, y nada más.
Truños interestelares ha habido muchos, así a botepronto se me ocurren: Dune, Stargate, todos los putos Transformers, El ataque de los clones, Campo de Batalla: la Tierra, y… Blade Runner. Ahí lo dejo, para la polémica, para otro día.
Los enlaces:
Gravity: http://danielmarin.naukas.com/2013/10/06/los-aciertos-y-errores-de-gravity-la-pelicula/
Interstellar: http://danielmarin.naukas.com/2014/11/09/los-aciertos-y-errores-de-insterstellar/
Vaya hombre, la cagaste tremendamente al terminar mezclando Blade Runner con los otros truños.
Blade Runner merece por sí sola una entrada, a mí me parece una película mejor cada vez que la veo. Y eso que cuando la vi por primera vez de chaval no la entendí muy bien, ni me cuadró ese ambiente gris, sucio, nocturno y lluvioso. SI la repusieran en algún cine en versión remasterizada y a lo grande, iría a verla sin dudar. Hasta te invitaría a ir a verla.
Lo mismo me pasa con 2001, Odisea del Espacio. La primera vez que la vi nos llevaron con el colegio a verla por la mañana en los cines Marvi de la calle Cartagena, que distaba unos 5 km de nuestro colegio y ahora es un bingo. Por cierto, qué buenos tiempos aquellos en que llevarte al cine era una actividad cultural para los colegiales. Entonces los de nuestra clase tendríamos unos 10 ó 12 años y no entendimos una mierda el siginificado de la peli, y recuerdo que cuando lo conté en casa mi padre dijo «pero hombre cómo os llevan a ver esa peli tan pequeños…». Recuerdo que en el patio discutimos durante unos días de qué coño era eso del monolito, si era Dios -estábamos en colegio de curas- o era una nave o a saber, aunque la explicación más detallada y buena creo que siempre la tuvo Carlos Pumares en su «especial monolito» de verano, que alguna vez llegué a oir grabado… Ese era el único día del año en que Pumares contestaba a la gente que llamaba al programa sobre el monolito, el resto del año los mandaba a hacer puñetas o decía «siguiente llamada por favor», jajaj qué crack….
Bueno, pues a pesar de no entenderla siendo tan críos, recuerdo que fue un espectáculo visual alucinante para todos, y eso que la peli ya se había estrenado como 10 ó 12 años antes y la vimos en los años en que se estrenaba La Guerra de las Galaxias -también recuerdo verla con padres y hermanos en el cine Benlliure, entonces no era una multisala, con mi madre acabando hasta las narices de ella mientras para los chavales aquello fue toda una experiencia mística-. Luego he visto ya de mayor 2001 en alguna sala de cine y muchas veces en casa, y sigue siendo un peliculón que asombra que se rodara incluso antes de llegar el Apolo XI a la Luna. Por cierto, ya rula por ahí una «carta» de Kubrick a Nolan bastante cachonda, no sé quién la habrá escrito pero si la firmara el mismísimo Kubrick encajaría bien:
http://www.filmaffinity.com/es/user/rating/480310/704416.html
Y volviendo a Nolan, resulta que esto era una entrada sobre su peli y estoy hablando de otras, más que nada porque esas otras pelis, como Wall-E -otro peliculón enorme- me merecen mucha más consideración que Interstellar, una peli que yo también me marqué como un «have to» en cuanto vi el primer trailer hace unos meses y que me defraudó bastante, pese a que me preparé para verla en condiciones: sesión golfa comenzando a las 12 de la noche, pantalla gigante, solo. Pues hale, según iba terminando, y sobre todo con la última media hora que parece resolver todas las tramas por la vía rápida y sin cuidado alguno, me pareció pretenciosa pero burda, supercientífica para unas cosas y tremendamente estúpida para otras, y a veces hasta potativa y ñoña con el tema del amor cruzando dimensiones y tal… eso está bien para escribir cartas a la novia desde la mili, ooooonvre, te lo digo por propia experiencia Nolan, ¡¡funcionaba!! Pero joder, no lo metas en una superproducción que sabes que aparte de mucho público va a traer a unos cuantos frikis espaciales que te van a auscultar con lupa y te van a reventar a tomatazos cuando te vean por la calle, merecidamente por esa memez y alguna otra…
En fin, yo tampoco voy a destripar la peli aquí porque se ha estrenado hace poco y quizá haya gene que lea esto y quiera ir a verla, más adelante podemos discutir sobre las cosas buenas y sobre las gilipolleces de la peli. Pero me quedo en que me defraudó bastante, esperaba mucho más. Me sentí un poco como con Prometheus, que se vendió como una precuela de la saga de Alien y la peli tiene unos comienzos alucinantes, de esos que te hacen removerte en la butaca diciendo «joder joder joder qué peazo peli me voy a tragar»… y sin embargo según va llegando el final te deja frío y te preguntas «¿pero es que se ha acabado la imaginación de los guionistas, ya sólo se les ocurre matar a todo el mundo y hacerlo explotar todo al final? Joder, con lo que cuesta diseñar y construir todo, cagonlá!!!». Fíjate en Wall-E, cómo en vez de arrasarlo y reventarlo todo, precisamente lo que al final triunfa es lo contrario: «vamos a reconstruir todo lo que nos cargamos», y te vas con una sensación doblemente reconfortante; una, por el mensaje positivo que has recibido, y dos, por lo bien que lo has pasado viendo la peli. Sin duda los mejores guionistas del mundo ahora mismo son los que están en Pixar -qué tremendos esos primeros 10 minutos de Up!, de lo mejor de lo mejor en la Historia del CIne-, o en algunas series de TV. El resto los deben sacar de una academia CCC, o de la fábrica ACME que surte al Coyote. Porque si no no me explico que sea tan difícil ver una buena peli estos últimos años.
Esta sería otra cosa para discutir algún día, no sé si en la barra de un bar o en un blog: ¿por qué siempre parece más interesante la vida y obras de los que se dedican a romper, destruir y machacar todo, como la mafia, los rambos o los canis tipo «faxandefurius», en vez de la de todos aquellos que se dedican a crear, construir, fabricar?
Vale vale, si ya lo sé, no hace falta que respondas.
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Genial la supuesta carta de Kubrick, grande. Me va a tocar hablar de Blade Runner, qué pereza, lo dejo para otro día.
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Imposible estar más de acuerdo contigo, Travis, solo añadiría la recomendación a los espectadores de que observen no solo ese significativo silencio aturdido del publico al a la salida de esas casi tres horas de película, sino también los comentarios jocosos de aquellos que reconocen haberse perdido «interestelrmente» hablando a mitad de pelicula y tienen el humor y la hulmildad de reconocerlo.
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Bueno, es verdaderamente original meter en el mismo saco de truños a Blade Runner (según IMDB tiene un 8,8 sobre 10 en metacritic) y a Campo de Batalla: La Tierra (un 0,9 sobre 10 según la misma fuente)
La segunda me parece una de las peores que he visto en mi vida. La primera es una de mis películas preferidas, de culto. Más truño me parece también a mí Prometheus, con lo que podía haber dado de sí.
Aprovecho para recomendar aquí Mud, también con McConaughey de protagonista, aunque no tenga nada de interestelar.
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Lo sé, y sé que le habrá sorprendido a algunos, pero yo no puedo con Blade Runner, me aburre profundamente. Y está claro que no coincido con mucha gente, pero yo hablo de mi opinión, no de listados cinéfilos ni puntuaciones IMDB. En algunos listados cinéfilos aparecen El árbol de la vida y Bailar en la oscuridad entre las mejores películas de los últimos 20 ó 30 años, y son unos tostones (unos truños) insoportables. En mi modesta opinión. Escribiré un día sobre Blade Runner y por qué no he conseguido que me gustara, y mira que lo he intentado,…
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Interstellar, es una buena peli. Mi punto de vista en esta entrada: http://escribemlo.com/2014/12/07/interstellar-2/
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Como curiosidad, te grapo en esta entrada un «mapa espacio-temporal» que encontré por ahí y que a algunos puede ayudar a comprender algo mejor la peli. Yo fui a verla al cine una segunda vez y mi opinión no mejoró.
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