No falla. Cada vez que ocurre una desgracia surge un “listo” que crea una teoría de la conspiración. Al principio estas teorías se generaban tras un atentado, un accidente de avión o una explosión repentina, pero últimamente vale casi todo, incluidos los desastres naturales o los lobos solitarios.
Recientemente, tras los atentados del semanario Charlie Hebdo en Francia, ha surgido su correspondiente “inventor conspiranoico”, el cual ha creído encontrar tras la masacre una “coreografía” o montaje cinematográfico pergeñados por oscuros gobiernos mundiales en la sombra para convencernos de la maldad del Islam y sus seguidores, Sigue leyendo