Chomsky, Timsit y la manipulación mediática, por Josean

10 reglas

Al gran Noam Chomsky se le atribuye por error el texto «Las 10 estrategias de manipulación mediática», que se ha convertido en fenómeno viral en Internet, pero que en realidad fue escrito por el francés Sylvain Timsit. El texto original es muy fácil de encontrar, yo dejo un par de links en los que se le atribuye a Chomsky de nuevo:

http://runrun.es/opinus/42097/los-10-mandamientos-de-noam-chomsky-por-gabriel-reyes.html

http://www.educacionmediatica.es/?p=1495

Para el que no lo haya hecho, recomiendo su atenta lectura. En cualquier caso, es un muy buen texto que incide en el asunto del control de la sociedad por parte de los gobernantes, y da un poco de miedo analizar uno a uno sus puntos, y comprobar cómo las 10 estrategias se están siguiendo y aplicando punto por punto por peperos, socialistas y nacionalistas en estos años recientes de crisis:

  1. La estrategia de la distracción. «… que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las élites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes”. Así que cuanto más hablemos de Rafa Nadal, los éxitos de La Roja, las gilipolleces de Belén Esteban o la Pantoja, menos se indignará el ciudadano con los recortes tan brutales que se están acometiendo o con los casos de corrupción.
  2. Crear problemas y después ofrecer soluciones. «Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar». «Crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos». ¿Qué tienen que ver las quiebras de Lehman Brothers, AIG, el agujero de Bankia o todo un país como Islandia, con el desmantelamiento del estado de bienestar? ¿O es el miedo el que hace que nos creamos como inevitables y hasta deseables las severas medidas que se van a tomar? Llevamos cinco años aguantando el miedo ese de «que viene la troika y te va a pegar los recortes que tus dirigentes no se están atreviendo a hacer», y con ese miedo estamos aceptando casi cualquier cosa.
  3. La estrategia de la gradualidad. «Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez». La historia se repite, reforma laboral salvaje, subidas de impuestos, recortes sociales, más subidas de impuestos, rebaja de las pensiones, empeoramiento de la educación, destrucción de puestos de trabajo… ¿hasta cuándo? Medidas que todas en su conjunto de golpe hubieran supuesto un levantamiento del pueblo, una rebelión en toda regla, pero que con esa gradualidad hemos llegado a tolerar.
  4. La estrategia de diferir. «Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá a mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento». Llevaban meses anunciando la subida del IVA, la creación del banco malo, las rebajas de las pensiones, los recortes a la Ley de la Dependencia, así que cuando han llegado, las hemos aceptado como necesarias. No sé si las consideran “dolorosas”. En Italia al menos vimos a una ministra llorar. En España en cambio tuvimos que escuchar un sonoro “que se jodan” en el Congreso, mientras se hablaba de recortes a los parados. Ya de paso, añado, frasecita pronunciada por una sujeta que vive en Madrid y percibe más de 1.800 euros mensuales por dietas de desplazamiento ya que obtuvo su escaño por Valencia. De tal palo…
  5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad. «La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discursos, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante». Esto me recuerda a la imagen de los cuatro ministros (Montoro, de Guindos, Soraya y Fátima Báñez) el 30 de diciembre de 2012, cuando anunciaron la primera “batería de medidas” “dolorosas y necesarias”. Nos miraron a la cara, como diciendo: “habéis sido malos, niños, y ahora os vamos a castigar”. O como aquella vez que todo un ministro como Montoro nos dijo: “si todos los españoles pagaran el IVA, ahora no sería necesario subirlo”. Me recordó al colegio: “¿Quién ha tirado la pelota? Mirad, niños, que como no salga, castigo a toda la clase, ¿eh? Bueno, pues vosotros lo habéis querido, el IVA y el IRPF más alto para todos, porque habéis sido malos, porque habéis vivido por encima de vuestras posibilidades”.
  6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión. «Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un cortocircuito en el análisis racional, y finalmente al sentido crítico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…» Quizás este sea el punto en el que tiene que mejorar la estrategia de comunicación del Gobierno, porque tanto de Guindos como Rajoy, como la Fabrita, aluden sólo a la necesidad de las medidas, y no a los sentimientos, provocando en el oyente una ira y una rabia que nos va a costar controlar. La única emoción que intentan transmitirnos es el miedo.
  7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad. «Hacer que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud». “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles de alcanzar para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas’)”. Desconozco la relación entre el incremento de canales de TDT y el aumento de la estupidez, pero soy optimista y creo que ha habido afortunadamente un despertar de la sociedad que por fin parece levantarse gritando “¡basta!”. Respecto a la educación en el sentido institucional de la palabra es una herramienta política más de control, y cada nuevo gobierno se aplica en cambiar la Ley anterior para amoldarla a sus intereses.
  8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad. «Promover al público a creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto, malhablado, admirador de gentes sin talento alguno, a despreciar lo intelectual, exagerar el valor del culto al cuerpo y el desprecio por el espíritu…» ¿Quién necesita ejemplos? La televisión está llena, la fama parece accesible y cercana, no hace falta ser brillante ni experto en ninguna materia, es más, el catetismo parece una virtud a explotar: Gran Hermano, Granjero busca esposa, ¿Quién quiere casarse con mi hijo?, Sálvame,…
  9. Reforzar la autoculpabilidad. «Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. ¡Y, sin acción, no hay revolución!» Nos recuerdan constantemente que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, que creíamos que podíamos tener un cochazo, una casa en la playa y viajar al Caribe, que el que no trabaja es porque no quiere, que como defraudamos tanto al paro, la seguridad social, y Hacienda, es por lo que nos merecemos lo que está por venir. Toda la culpa es nuestra, en absoluto de… así, a vuelapluma, de Goldman Sachs, Lehman Brothers, Madoff, Kerviel, Mª Dolores Amorós, Blesa y Rato, el cura Castillejo, José Luis Méndez, la familia Pujol, los artistas de los ERE’s, Bárcenas, Fabra, los defraudadores sindicales de los cursos de formación y un interminable etcétera de gentuza.
  10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen. «En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídas y utilizados por las elites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos». Antes de cada medida, los estudios sociológicos y las encuestas demuestran a los gobernantes que van a seguir contando con el apoyo de la mayor parte de sus seguidores (apenas un 30% de los votantes del PP desaprueban las medidas tomadas). El bipartidismo se mantiene en España, aunque empieza a apreciarse la brecha, al contrario que en otras democracias cercanas, donde los dos principales partidos han sufrido un duro (y merecido) castigo electoral.

Cara Josean

 

6 comentarios en “Chomsky, Timsit y la manipulación mediática, por Josean

  1. Gracias por los enlaces, Juan Carlos. Si eres de Parla, mucha suerte, a ver si conseguís echar a los que están en el Ayuntamiento y encontráis una solución, aunque lo veo difícil. El pufo que han dejado en el consistorio va a durar 20 años por lo menos. Saludos.
    Josean.

    Me gusta

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.